¿Qué quiere decir? Pues que nuestros dientes siempre están en continuo desarrollo durante toda la vida.
A simple vista se ven los incisivos, que son los que cortar la comida y pasa a los molares, que la machacan.
Un conejo sin problemas dentales tendrá una buena alineación, y al masticar sus dientes se desgastaran pero hay animales que sufren de maloclusión.
Este problema es bastante común, sobre todo en aquellos conejos que tienen una cara achatada. Su insólito (o anormal) cráneo les produce un desalineamiento dental.
Cuando los dientes no están bien alineados los incisivos empiezan a crecer sin control haciendo que lleguen a salir de la boca curvándose hacía arriba o abajo. Llegado a este punto, al conejo se le hará muy difícil poder comer.
Y no solamente pueden dar problemas los dientes incisivos, sino también los molares.
Algunos de estos dientes desarrollan espuelas o "pinchos" en los bordes provocando heridas en la lengua o en la mejilla.
Algunos síntomas de problemas dentales:
- Ojos llorosos
- Babeo
- Intentar comer pero no llevarse la comida a la boca
- Comer poco o rehusar hacerlo
- Beber en exceso