Desde hace meses, en el Reino Unido han muerto más de 400 conejos por culpa de la Enfermedad Hemorragica. Ésta ha mutado de tal manera que los dueños de los conejos fallecidos no tenían ni la menor idea de que padecían la enfermedad,al no mostrar ningún síntoma.
Pero no sólo se trata de los conejos que han muerto, si no de los posibles infectados, ya que afecta tanto a los conejos domésticos como a los salvajes.
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El veterinario Richard Saunders, de la Rabbit Welfare Association and Fund, explicó que hay más de un millón de conejos desprotegidos que corrían riesgo. "La mayoría de los propietarios no saben nada de esto. Desafortunadamente muchos veterinarios nunca han creído necesario vacunar a los conejos ya que normalmente los subestiman".
Uno de los tantos dueños que han perdido a sus conejos, Peter Smith, contó que no mostraban ningún signo. "Estaba en la cocina, que no está muy lejos de donde tenía a los conejos y oí un chillido fuerte. Fuimos corriendo y encontramos a uno de los conejos muertos".
En su caso, tanto los gazapos como los adultos estaban afectados.
Las vacunas que se han estado usando hasta ahora y que parece que funcionan son las que importan de España y Francia, quienes estos últimos tuvieron que desarrollar una nueva vacuna al verse afectados por esta mutación por allá el 2010.
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